A pesar de los avances con respecto a la salud materno-perinatal, las estadísticas relacionadas con la mortalidad y morbilidad neonatal  siguen siendo una preocupación. Se estima que dos de cada tres resultados neonatales adversos son evitables con medidas eficaces en la atención a la gestante, durante el parto y la primera semana de vida. Los resultados neonatales adversos son un importante problema de salud pública y las principales causas de morbilidad y mortalidad neonatal. El manejo de los embarazos macrosómicos, se ha convertido en un dilema común en la práctica obstétrica diaria debido a la creciente incidencia de partos macrosómicos, que plantean riesgos potenciales tanto para las madres como para los recién nacidos.